La mujer es algo mientras que el hombre no es nada.
Buscamos la belleza sin lujo.
La historia es un incesante volver a empezar.
Entre hombre y hombre no hay gran diferencia. La superioridad consiste en aprovechar las lecciones de la experiencia.
Hombres ilustres tienen por tumba la tierra entera.
La fortaleza de un ejército estriba en la disciplina rigurosa y en la obediencia inflexible a sus oficiales.
Porque así como a la ciudad que tiene quietud y seguridad, le conviene no mudar las leyes y costumbres antiguas, así también a la ciudad que es apremiada y maltratada de otras, le cumple inventar e...
Recordad que el secreto de la felicidad está en la libertad, y el secreto de la libertad, en el coraje.