Usted puede falsificar su edad o la máscara, pero la pasión que mueve a los personajes tiene que ser real.
En comparación con el baile, las películas me parecían ser obra de laicos vagos. No había dolor físico, sino que era suficiente para decir e imaginar lo que estaba en el guión. Fue muy fácil pa...
La película me impidió trabajar como secretaria. Fue un verdadero golpe de suerte. Un milagro.
Fui a clases de baile desde las 9 de la mañana hasta las 1, y luego a la escuela de 3 a 10 de la noche, siempre bajo la amenaza de que si no he logrado un ciclo único que podía olvidarse de baile.
La gente le encanta venir en la televisión, incluso si tienen que mostrar sus miserias.