Las cosas se llaman equívocas cuando tan solo tienen de común el nombre.
Aristóteles
La tradición intelectual es de servilismo hacia el poder, y si yo no la traicionara me avergonzaría de mi mismo.
Las desgracias que podemos soportar vienen del exterior; son accidentes. Pero sufrir por nuestras propias faltas. . . Es ahí donde reside el tormento de la vida.
La Asamblea Constituyente cometió una gran tontería al abolir la nobleza, lo que humilla a todo el mundo. Yo he hecho algo mejor: he convertido en nobles a todos los franceses, todos pueden sentirse...
Desde tales hasta los más quiméricos charlatanes no hubo ningún filósofo que influyese ni siquiera en las costumbres de la calle donde vivía.