Y si llegaras a hombre, ¿a qué más podrías llegar?.
Antonio Porchia
Enseñando aprendemos.
No el posición, sino disposición.
A veces nos dirigimos a dios mendigando un poco de alegría y otras veces le brindamos nuestra propia alegría. En tales momentos nos hallamos más cerca de Él, porque no es nuestra necesidad, sino n...
¡Oh tierra, antes y ahora, siempre fecunda y bella!.