A casa vieja puertas nuevas.
Refrán
La vejez es la pérdida de la curiosidad.
A su amigo, el gato le deja siempre señalado.
Las recompensas espirituales son las que realmente me han permitido vivir esta vida.
Este juego pertenece a todos los pueblos y a todas las épocas y nadie puede saber de él qué divinidad lo regaló a la Tierra para matar el tedio, aguzar el espíritu y estimular el alma.