Quien no tienen alas no debe tenderse sobre abismos.
Friedrich Nietzsche
Son mis ilusiones infantiles las que todavía me hacen decir si percibo una fisura en la coraza de un hombre: no todo está perdido, hace falta poco para hacer palpitar a ese corazón detenido.
Un cuerpo aloja una vida. Y un corazón la acaricia.
Nunca seremos recolectores de esbeltas espigas o de flores si en los surcos nuestros diarios empeños carecen de la fuerza que les dan los sueños.
La edad no juega ningún papel salvo en los quesos.