Los platónicos olvidan excesivamente que el amor es una física antes de ser un ensueño.
Remy De Gourmont
Cuando te inunde una enorme alegría, no prometas nada a nadie. Cuando te domine un gran enojo, no contestes ninguna carta.
El sabio es y no oprime.
Ingrato es el que solo en secreto es agradecido.
En cuanto a los pobres virtuosos, uno puede compadecerlos, por supuesto, pero es imposible admirarlos.