En cuanto a los pobres virtuosos, uno puede compadecerlos, por supuesto, pero es imposible admirarlos.
Oscar Wilde
La verdadera prueba de la moralidad de la humanidad, la más honda (situada a tal profundidad que escapa a nuestra percepción), radica en su relación con aquellos que están a su merced: los animale...
Los vuelos naturales del espíritu humano no van de placer a placer sino de una esperanza a otra.
Al hombre osado, la fortuna le da la mano.
La muerte es una vida vivida. La vida es una muerte que viene.