El tejido es muy propicio para el pensamiento. Es agradable para tejer un rato, dejó las agujas, escribir un rato, y luego tomar el calcetín de nuevo.
Dorothy Day
¡Qué fuerza tiene el alma humana! - pensó Lily; la presencia de la señora Ramsay simplificaba la complejidad de todas las cosas.
El trabajo es vida.
Y ni condenas ni odios, sino amor resignado y amorosa paciencia nos acercan a la meta sagrada.
Los que conocen nuestra historia saben que fuimos al infierno juntos - a través de descuidos y tiempos terribles.