Un sol eterno y puro me alumbra noche y día… ¡Porque en mi corazón está el amor!.
Rafael Lasso de la Vega
Mientras dura, vida y dulzura.
Ninguna época ha sabido tantas y tan diversas cosas del hombre como la nuestra. Pero en verdad, nunca se ha sabido menos qué es el hombre.
Hombre bondadoso, nunca envidioso.
El buen gusto estropea ciertos valores espirituales auténticos: como el propio gusto.