Sallust: Como las bendiciones de la sal...

Como las bendiciones de la salud y la fortuna tienen un principio, por lo que también deben encontrar su fin. Todo lo que sube, pero a la baja, y aumenta pero a decaer.
Sallust
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Cuando tenía 40, mi doctor me informó que un hombre de unos 40 años no debería jugar al tenis. Yo hacía caso de sus consejos cuidadosamente y apenas podía esperar hasta llegar a 50 para empezar ...

Se dice esto por ello y no por ello se dice esto.

Sin sobriedad nadie puede hacerse rico, y con ella muy pocos serán pobres

Los seres humanos tienen facultades más elevadas que los apetitos animales y, una vez se han hecho conscientes de ellas, no consideran como felicidad nada que no incluya su satisfacción.