El largo tiempo que no voy a existir tiene más efecto en mí que este corto tiempo presente, que sin embargo parece no tener fin.
Cicerón
El que niega su propia vanidad suele poseerla en forma tan brutal, que debe cerrar los ojos si no quiere despreciarse a sí mismo.
Hay una vieja maldición, dice: Ojalá vivas tiempos interesantes.
Si los seres humanos tuviésemos dos cerebros, seguro que haríamos el doble de tonterías.
La codicia y la riqueza se reparten el poder en nuestra sociedad, y ese poder es utilizado a su vez para aumentar y concentrar más riqueza y poder en manos de unos pocos.