Una de las cosas más aventureros nos dejó de ir a la cama. Porque nadie puede poner la mano en nuestros sueños.
E. V. Lucas
Nunca he jodido a nadie que no se lo tuviera mas bien que merecido. (Tony Montana)
El hombre alcanza el punto más alto de la amabilidad entre los 12 y los 17, para llegar nuevamente, en una segunda floración, entre los 70 y los 90 años de edad.
Requemado por el sol y la violada, redondeada, iridiscente, gelatinosa y violada vejiga de una medusa flotando cerca del bote.
Mejor es un nombre que el buen aceite, y el día de la muerte que el día en que uno nace