En 1947 me casé con Rowena Palmer, y tenemos dos hijas, Alison y Claire, y un hijo, John.
Martin Ryle
Las Artes se convierten en instrumentos de información manipulados y manipuladores
La envidia como la ictericia se conoce en el color de los ojos y en el de la piel
El poder cree que las convulsiones de sus víctimas son de ingratitud
Me preocuparía si no iba a venir con ideas, si no me inspiré.