La ira es nuestro auténtico enemigo ya que se haya en nuestra mente. La ira no cambia nunca su naturaleza. Siempre hiere y destruye. Y lo que es peor, aniquila nuestras propias fuerzas y energías.
Dalai Lama
Porque sin fuerzas de colisión no hay movimientos y no hay realidad
Hay situaciones que los hombres aprecian con su instinto, pero que no pueden comentar con su inteligencia.
Dado que los pacientes y los consumidores, se nos informa mejor hoy sobre nuestra salud que cualquier generación anterior.
El hombre superior es impasible; se le vitupere o se le alabe, siempre sigue adelante