Hannah Arendt: Ningún castigo ha poseído nu...


Ningún castigo ha poseído nunca suficiente poder de disuasión para evitar la comisión de delitos. Por el contrario, cualquiera que sea la pena, una vez que un delito específico ha aparecido por primera vez, es más probable que su aparición inicial podría jamás haber sido su reaparición.

Hannah Arendt


Temáticas Relacionadas