El ser humano ama la compañía, así sea de una velita encendida
Georg Christoph Lichtenberg
A nadie le gusta perder, y punto. Se debe doler, debe picar, y no quiero sentir esa sensación de nuevo.
Ya pasó la Navidad y negocios son los negocios.
El envidioso enflaquece al ver la opulencia del prójimo
Todo esto caricias y besos en el escenario estos días, así que todo está bien en el fútbol cuando alguien marca un gol, pero no cuando se está jugando dardos.