No hay que morir por el otro, sino vivir para disfrutar juntos.
Jorge Bucay
Las razas laboriosas encuentran una gran molestia en soportar la ociosidad.
Esa es la madre del cordero.
Los solteros ricos deberían pagar más impuestos. No es justo que unos sean más felices que otros.
Teme a quien te teme, aunque él sea una mosca y tú un elefante.