El fracaso de la política económica nacional nos está costando más de puestos de trabajo, sino que ha comenzado a debilitar ese espíritu singularmente Americana de toma de riesgos, gran ambición y optimismo sobre el futuro. Debemos unirnos en ellos ahora a las salidas audaces que reconstruir nuestra moral nacional, así como nuestra prosperidad material.
Mitch Daniels