Tengo una oreja frente a la otra.
José María Aznar
No se comprende primero y luego actúa. Cuando comprendemos, esa compresión absoluta es la acción.
Algo genial de volverse viejo es que te puedes escabullir de toda clase de compromisos sociales solo diciendo que estás cansado.
Quien recibe agradecido da copiosas cosechas.
Yo escribí algo de mala poesía que he publicado en revistas del norte de África, pero mientras me retiraba en esta lectura, también me llevó la vida de un tipo de joven hooligan.