El tiempo es tan precioso como lo es el dinero.
Horace Mann
A una persona naturalmente confiada le lleva bastante tiempo reconciliarse con la idea de que, después de todo, Dios no lo ayudará.
El toreo es un arte misterioso, mitad vicio y mitad ballet. Es un mundo abigarrado, caricaturesco, vivísimo y entrañable el que vivimos los que, un día soñamos con ser toreros.
Vivir para los demás no es solamente una ley de deber, sino también una ley de felicidad.
Todas las generalizaciones son peligrosas, incluida ésta.