No soy un 'amarrategui', pero tampoco gilipollas.
Manuel Preciado
La cordura, por ejemplo, nos enseña que el único medio para conservar la civilización consiste en obrar con decencia y con inteligencia.
La energía interior, esencialmente nueva, destinada a lanzarse contra lo exterior para renovarlo, es una energía directora.
La sociedad no puede subsistir sin recíprocas concesiones
Ortodoxia bíblica sin compasión es sin duda la cosa más fea del mundo.