La ingratitud humana no tiene límites.
Gabriel García Márquez
Estoy muy agradecido de estar haciendo lo que estoy haciendo. Me siento muy bendecido.
Bendita sea la parte de nosotros que nos protege de tanto dolor y tristeza. En el corazón de la vida hay una caja de fusibles.
Odiar a alguien es sentir irritación por su simple existencia.
Quien solo busca el aplauso de los demás, pone su felicidad en manos ajenas