Las leyes son como las telas de araña, a través de las cuales pasan libremente las moscas grandes y quedan enredadas las pequeñas.
Honoré de Balzac
No solamente es ciega la fortuna, sino que de ordinario vuelve también ciegos a aquellos a quienes acaricia.
El amor nunca tiene razones, y la falta del amor tampoco. Todo son milagros.
Se tienen muchas ideas y pocos amigos o muchos amigos y pocas ideas.
No ha lugar la razón contra la fuerza de la pasión.