Francisco de Quevedo: «Entre dos peñas feroces, un...

«Entre dos peñas feroces, un fraile daba voces».
Francisco de Quevedo
Más frases

Hay que agarrar al toro por la raíz de cacho.
Al contrario, el esfuerzo físico la llenaba de energía, el agotamiento se convertía en vivacidad y gracia, los días eran largos, lentísimos, y el mundo (percibido como un naufragio interminable) ...
Cuanto más te identificas con el pensamiento, con lo que te gusta o disgusta, con tus juicios e interpretaciones, es decir, cuanto menos presente estás como conciencia observante, más fuerte es la ...
Ya se ha echado encima el calor y con él comienza de nuevo a florecer la cultura del desolladero, la sangre, los cuernos, los puyazos, las cuchilladas, los vómitos, los aplausos. [... ] En el palaci...