Era una de aquellas sonrisas excepcionales que poseían la cualidad de ser eternamente reconfortantes por sí mismas, de las que uno se encuentra sólo cuatro o cinco veces en la vida.
Francis Scott Fitzgerald
Te confieso que no sé lo que persigo, que tampoco sé muy bien hacia dónde voy y que explicar mi poema es imposible. Por otro lado, el arte no tiene explicación alguna. Cada uno debe deducirla de s...
Es verdad que hay gobiernos constitucionales corrompidos también; pero al paso que los gobiernos constitucionales tienen que cuidarse porque deben asistir a unas elecciones y pueden perderlas si hay ...
Yo no soy un "vivo", soy apenas un gil avivado.
¡Ah, la inteligencia natural y la sabiduría acumulada con los años también pesan, sobre todo por la lucidez que provocan!