Además, olvida usted, señor Otis, que el precio que pagó incluía tanto el castillo como el fantasma...
Oscar Wilde
Somos lo que somos, pero somos también lo que vendrá. (...) Pretendemos ser nuestros deseos y somos mortales. Somos apenas el desdén de lo humano y sobrehumano.
Jesús va con nosotros en las tormentas.
Puede que el mundo necesite que lo arreglen, pero vale la pena preservarlo.
Todo el mundo tiene meido. Pero si nos mantenemos unidos, si intentamos estar disponibles para los otros, ya no tendremos miedo.