No te preocupes porque los niños nunca te escuchen; preocúpate de que siempre te estén viendo.
Robert Fulghum
Cada niño que nace en el mundo es un nuevo pensamiento de dios, una posibilidad radiante y fresca.
Había un tiempo en el que no esperabamos nada de nuestros niños menos obediencia, a diferencia de la actualidad, cuando esperamos todo menos obediencia.
Si puedes dar un solo regalo a tu hijo o hija, que sea entusiasmo.
Inevitablemente guiamos a nuestros niños al fracaso y frustración cuando intentamos establecer metas para ellos.