La ciudad no cuenta su pasado, lo contiene como las líneas de una mano, escrito en las esquinas de las calles, en las rejas de las ventanas
Italo Calvino
La Lotería, con su reparto semanal de enormes premios, era el único acontecimiento público al que los proles prestaban verdadera atención. Era probabl...
Sin ir más lejos: si a usted le transplantan mi cerebro por ejemplo, y a mí el suyo, usted sería el autor de este libro, y yo un hombre cuerdo.
Nada es más peligroso que una idea cuando no se tiene más que una.
Mi meta es la misma que he tenido desde pequeña: ¡Quiero gobernar el mundo!