Idries Shah: Si no puedes reír con frecuen...

Al radicalismo ya no lo destruye nadie: es un temperamento, más que un partido político, para destruirlo, anularlo por completo y para siempre, no hay sino un medio, entregarle toda la República pa...

A ratos, cuando se volvía para sacudir la ceniza del cigarrillo en un platito, yo aprovechaba para mirar de soslayo las uñas rojas de sus pies, el brillo dorado de las pantorrillas afeitadas, el pro...

Ambos eran conscientes de tener tan pocas cosas en común que nunca se sentían más solos que cuando estaban juntos, pero ninguno de los dos se atrevía a lastimar los encantos de la costumbre. Neces...

Al principio fue un fuerte golpe, pero como mi familia y la de ella ya sabe, estoy más relajado.