No sé dónde nos han enseñado que socorrer al desvalido equivale a apartarlo de las garras de la muerte a cualquier precio.
Mario Bellatin
Los hombres ambiciosos que afectan señoría en sus ciudades, ábrense en ellas rumbo mostrándose parciales de la muchedumbre, y halagándola con ciertos simulacros o apariencias de libertad.
El hombre inventó el lenguaje para satisfacer su profunda necesidad de quejarse..
Estoy dispuesto a seguir dando guerra en la buena dirección.
«Cuando alguien te engaña, la primera vez es culpa suya, la segunda vez, la culpa es tuya».