La felicidad no consiste en adquirir y gozar, sino en no desear nada, pues consiste en ser libre.
Epicteto
10. Unas Manos Que Huelen A Crepúsculos...
Unas manos que huelen a crepúsculos,
-de nuevo el verde olvido de la noche-,
la oblicua soledad llena canastos ateridos,
la oscuridad de todo gesto y sus ...
El problema no es saber demasiado, el problema es que los demás sepan que tú sabes demasiado.
El secreto de un buen jugador es saber descubrir que espera el otro, y saber hacer creer que va a obtenerlo.
Si nos atrevemos a creer en la vida eterna,
a vivir para la vida eterna, veremos cómo la vida se torna más rica, más grande, libre y dilatada.