El honor que se vende, aunque se dé muy poco por él, siempre se paga más de lo que realmente vale.
Clarín Porteño
Tengo tres perros peligrosos: la ingratitud, la soberbia y la envidia. Cuando muerden dejan una herida profunda.
Solo a partir de mi mente puedo transformar al paraíso en infierno o al infierno en paraíso
Tenía tan mala memoria que se olvidó de que tenía mala memoria y se acordó de todo.
Es muy difícil saber lo que sucede en el cerebro de un niño; pero es imposible saber lo que sucederá en el.