La suerte nunca da, solo presta.
Proverbio Sueco
Murió de Nuevo Un Día...
Murió de nuevo un día... yo la amaba,
mas sin remedio se murió ese día...
-¡Vuelve, Rabino, vuelve!... - yo clamaba -
pero el Rabino rubio no volvía.
Pasó la niña ...
No hay venganza más bella que aquella que infringen los otros a tu enemigo. Tiene hasta la virtud de dejarte la parte del generoso.
Cada hombre, en el fondo de su corazón, tiene derecho a creerse enteramente igual a los demás hombres; de ello no se desprende que el cocinero de un cardenal deba ordenar a su amo que le haga la cen...
Solo sanamos de un dolor cuando lo padecemos plenamente.