Cuando mi amigo está infeliz, voy a su encuentro; cuando está feliz , espero que me encuentre.
Henry Frédéric Amiel
Hay hombres que no suben después de caer.
El deseo muere automáticamente cuando se logra: fenece al satisfacerse. El amor en cambio, es un eterno insatisfecho.
Dios le da una lombriz a cada pájaro, pero no se la lleva hasta el nido.
La fe y la duda no tienen mucho que ver con el intelecto ni con el carácter. Son estados de espíritu. Por eso no son constantes, y siempre existe una predisposición hacia uno u otro de ellos. La ex...