En ese instante sentí una horrible tristeza y, sin embargo, algo así como un brote de risa empezó a cosquillearme el alma.
Fiodor Dostoievski
El ojo no lleva carga, pero sabe cuánta puede soportar la cabeza.
El que ha conocido solo a su mujer y la ha amado, sabe más de mujeres que el que ha conocido mil.
El Extranjero
Tú eres Aquiles, el hermoso perdedor,
el de la espada de hierro,
el de la radiante cabeza coronada,
el mejor.
La verdad que sí,
¡Oh dioses inmortales!
que eres realmente bello.
Y no ...
El instante vuela incontenible, y aunque nos esforcemos estamos condenados a pasar sin detenernos.