En cada uno de nosotros hay un artista, un amante y un guerrero.
M Velandia
Riñas de enamorados, amores doblados.
El rendirse a la ignorancia y llamarla dios siempre ha sido prematuro y sigue siéndolo hoy día.
Dulce amor el alcanzado con dificultades.
Nadie conoce toda la amargura de lo que aguarda en el futuro. Y si de pronto apareciera como en un sueño, la negaríamos apartando los ojos de ella. A esto le llamamos esperanza.