Dales placer, el mismo que consiguen cuando despiertan de una pesadilla.
Alfred Hitchcock
En esta vida hay lágrimas, y lo que importa, después de todo, es ante que lloramos.
No todas las cosas están bien a todos.
Llueve copiosamente sobre mi cara y solo pienso en tu lejano amor mientras cobijo con todas mis fuerzas, la esperanza.
El amigo, lo escojo yo, el pariente, no.