De las flores, la violeta; de los emblemas, la cruz; de las naciones, mi tierra; y de las mujeres, tú.
Ricardo Palma
Le expliqué que el mundo es una sinfonía, pero que dios toca de oído.
La música es el lenguaje que me permite comunicarme con el más allá.
Quien gobierna podrá contar siempre con la cobardía de los argentinos.
Los días lentos se apilan, evocando un viejo antaño.