Cumple con la gratitud del peregrino, no olvidar nunca la fuente que apagó su sed, la palmera que le brindó frescor y sombra, y el dulce oasis donde vio abrirse un horizonte a su esperanza.
¿Dices que no se siente la despedida?, ¡Ay!, di al que te lo dijo que se despida.
Es preciso no estar en sus cabales para que un hombre aspire ser poeta; Pero, en fin es sencilla la receta. Forme usted líneas de medida iguales, y luego en fila las coloca juntas poniendo consonante...
Bello es ver en la llanura una palmera piramidal; más, mujer, en tu hermosura todo es más regio, todo es triunfal!.
Quién me diera, flor divina, ser la gota peregrina del ligero rocío matinal, que ha vivido un solo instante acariciada y amante, entre la sonrisa loca de tu boca de coral!.
De las flores, la violeta; de los emblemas, la cruz; de las naciones, mi tierra; y de las mujeres, tú.
Morena del alma mía; morena, por tu querer pasaría yo la mar en barquito de papel.
Amame como quiere su ambrosía en el jardín la flor; como ama de su voz la melodía festivo ruiseñor.
En el libro de tu historia en ser yo, flor de las flores, página hermosa de amores tengo empeño.
Hablemos y escribamos en americano; es decir en lenguaje para el que creamos las voces que estimemos apropiadas a nuestra manera de ser social, a nuestras instituciones democráticas.
Siempre vives, alma mía, en mis recuerdos de amor, como el perfume en la flor.
En el fondo la tradición no es más que una de las formas que podía revestir la historia pero sin los escollos de ésta. Cumple a la historia narrar los sucesos secamente, sin recurrir a las galas d...
El deber no es el éxito, es la lucha.
las mujeres son como las ranas, que por una que zambulle salen cuatro a flor de agua.
Cuéntase de los Castilla, para comprobar lo ensoberbecidos que vivían de su alcurnia, que cuando rezaban el Avemaría usaban esta frase: Santa María, madre de Dios, parienta y señora nuestra, rueg...
para todo hay genios en la viña del Señor.