Las obras no se acaban, se abandonan.
Paul Valéry
Hijo mio, la felicidad está hecha de pequeñas cosas: un pequeño yate, una pequeña mansion, una pequeña fortuna.
No consideraremos milagrosa ninguna experiencia que podamos tener, sea la que sea, si de antemano mantenemos una filosofía que excluye lo sobrenatural.
De la escarcha No olvides jamás El gusto a soledad.
Desde la infancia da señales el ingenio.