Los tiranos se rodean de hombres malos porque les gusta ser adulados y ningún hombre de espíritu elevado les adulará.
Aristóteles
No hemos perdido la fe pero la hemos transferido de dios a la profesión médica.
Cuando más se pone a prueba la habilidad conciliatoria de una persona, es cuando tiene que concertar con un necio.
No existe nada más interesante que la conversación de dos amantes que permanecen callados.
A lo largo del río no encontré ningún puente ese día sin fin.