La verdadera amistad, no tiene edad, ni tiempo, ni distancias... perdura para siempre en el corazón y en el alma.
La gente en su mayoría pueden oler la mentira.
Después de más edad, dos cosas son tal vez más importante que los demás: la salud y el dinero.
Dios me perdone, eso es asunto suyo.
El verdadero remedio para la mayoría de los males no es otro que la libertad, libertad ilimitada y completa, libertad en cada campo de la acción humana.