Iluminaste mi existencia llenando el arca vacía de mi corazón.
Alfonso Orantes
Albergue pobre. Los gemidos del perro en la lluvia nocturna.
El Alto Gris
Que está más alto Dios lo sabes
tú por el fervoroso pensamiento,
aquí, vacío de palabras
y casi ya vado de recuerdos.
Alma de paz que al cielo de la tarde
subes en brazos del silen...
Haré que la ternura te llegue entre las olas y que el rocío del alba jamás te encuentre a solas, que la espuma te arrulle dormido entre mis brazos y ser como la espuma besándote los labios.
¡Cuánto le costó a la muerte apagarte los ojos!.