Colección de pepe

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El que recibe lo que no puede pagar, engaña.

Séneca

Cuando estás en la calle es cuando te das cuenta de que todo tiene dueño y de que hay cerrojos en todo. Así es como funciona la democracia: coges lo que puedes, intentas conservarlo y añadir algo si es posible. Así es también como funciona la dictadura solo que una esclaviza y la otra destruye a sus desheredados.

Charles Bukowski

Escóndeme que el mundo no me adivine. Escóndeme como el tronco su resina, y que yo te perfume en la sombra, como la gota de goma, y que te suavice con ella, y los demás no sepan de dónde viene tu dulzura...

Gabriela Mistral

La justicia te proporcionará paz, y también trabajos.

Ramón Llull

El jugador de ajedrez debe trasladar sus capacidades intelectuales a otras artes como las letras y la filosofía, ya que realiza muchas más combinaciones que casi todos los autores literarios.

Paul Valéry

El sentido común no es nada común.

Voltaire

A hoy, lo veo; en mañana, poco creo.

Refrán

El ejemplo de Estados Unidos es absurdo; si los Estados Unidos estuvieran en el centro de Europa, no resistirían más de dos años a la presión de las monarquías.

Napoleón Bonaparte

La música es el territorio donde nada nos hace daño.

Andrés Calamaro

Lo que se necesita para conseguir la felicidad, no es una vida cómoda, sino un corazón enamorado.

Josemaría Escrivá de Balaguer

Un libro es como un jardín en el bolsillo.

Proverbio Armenio

Demasiados compositores de nuestra época pretenden ser "modernos", sin poseer el don de la originalidad. Y no comprenden que todo artista original es moderno por fuerza.

Heitor Villalobos

Quien gobierna podrá contar siempre con la cobardía de los argentinos.

Juan Manuel De Rosas

La música es el lenguaje que me permite comunicarme con el más allá.

Robert Schumann

Le expliqué que el mundo es una sinfonía, pero que dios toca de oído.

Ernesto Sábato

En gustos y colores, no discuten los doctores.

Refrán

El Año Que Viene

Para Sharon Keefe Ugalde

Hacer girar el corazón contra su aguja,
contra el tiempo y su sangre, contra la memoria,
desploma mi pared. ¿Seré un rechazo
de piedra más, herida en el escombro?
No crujas, por cansada, alma mía enzarzada en mi pared,
en mi rodar del tiempo. Está Jerusalén a tientas de la mano,
y ya piso su umbral.

María Victoria Atencia

Ãrbol que crece torcido, jamás su tronco endereza.

Refrán