Tenemos dos orejas y una sola lengua para que oigamos más y hablemos menos.
Los grandes son como el fuego, al que conviene no acercarse mucho ni alejarse de él.
Todo se consigue con el trabajo, hasta la virtud.
Es el privilegio de los dioses a querer nada, y de los hombres divinos a quien quiere poco.
Los que tienen la virtud siempre en la boca, y el abandono en la práctica, son como un arpa, que emite un sonido agradable a los demás, mientras que sí es insensible a la música.
El hombre es el más inteligente de los animales - y el más tonto.
La vid tiene tres tipos de uva: el primero de placer, el segundo de la intoxicación, el tercero de disgusto.
No soy ateniense ni griego, sino un ciudadano del mundo.
El rubor es el color de la virtud.
Cuando miro a los marineros, los hombres de ciencia y los filósofos, el hombre es el más sabio de todos los seres, cuando miro a los sacerdotes y profetas nada es tan despreciable como el hombre.
La fundación de cada estado es la educación de su juventud.