Frases de Gilbert Keith Chesterton ( 2 )
La cama una experiencia perfecta si tuviera un lápiz de color el tiempo suficiente para dibujar en el techo.
La única educación eterna es esta: estar lo bastante seguro de una cosa para decírsela a un niño.
La iglesia nos pide que al entrar en ella nos quitemos el sombrero, no la cabeza.
Puedo creer lo imposible pero no lo improbable.
La aventura podrá ser loca, pero el aventurero ha de ser cuerdo.
La respuesta a cualquiera que hable de "exceso de población" es preguntarle si él mismo es parte de ese exceso de población, o si no lo es, cómo sabe que no lo es.
Sentir que se ríe de nosotros algo al mismo tiempo inferior y más fuerte que uno es espantoso.
Al hombre de cada siglo le salva un grupo de hombres que se oponen a sus gustos.
La edad de oro retorna a los hombres cuando, aunque solo sea momentáneamente, se olvidan del oro.
No puedes hacer una revolución para tener la democracia. Debes tener la democracia para hacer una revolución.
No hay cínicos, no hay materialistas. Todo hombre es un idealista, solo que sucede con demasiada frecuencia que tiene un ideal equivocado.
No es bueno que los hombres sepan hasta que punto somos buenos.
La madurez hace al hombre más espectador que autor de vida social.
Cuando se deja de creer en Dios, enseguida se cree en cualquier cosa.
El lugar donde nacen los niños y mueren los hombres, donde la libertad y el amor florecen, no es una oficina ni un comercio ni una fábrica. Ahí veo yo la importancia de la familia.
A algunos hombres los disfraces no los disfrazan, sino los revelan. Cada uno se disfraza de aquello que es por dentro.
Solamente el bígamo cree de verdad en el matrimonio.
Bebed porque sois felices, pero nunca porque seáis desgraciados.
Un loco pierde todo, menos la razón.
Donde acaba la biología comienza la religión.