Frases de José Ortega y Gasset ( 2 )
La mayor parte de los hombres no tiene opinión, y es preciso que esta le venga de fuera a presión, como entra el lubricante en las máquinas.
Con la moral corregimos los errores de nuestros instintos, y con el amor los errores de nuestra moral.
Dime cómo te diviertes y te diré quién eres.
El progreso no consiste en aniquilar hoy el ayer, sino, al revés, en conservar aquella esencia del ayer que tuvo la virtud de crear ese hoy mejor.
El rico se abre un cauce y luego el cauce esclaviza al rÃo.
La vida nos ha sido dada, pero no nos ha sido dada hecha.
El camouflage es, por esencia, una realidad que no es la que parece. Su aspecto oculta, en vez de declarar su sustancia. Por eso engaña a la mayor parte de las gentes. Solo se puede librar de la equiv...
Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas.
El malvado descansa algunas veces; el necio jamás.
Los hombres no viven juntos porque sÃ, sino para acometer juntos grandes empresas.
La vida cobra sentido cuando se hace de ella una aspiración a no renunciar a nada.
La civilización no dura porque a los hombres solo les interesan los resultados de la misma: los anestésicos, los automóviles, la radio. Pero nada de lo que da la civilización es el fruto natural de un...
¿Qué perfección es ésta que complace y no subyuga, que admira y no arrastra?.
El que quiera contemplar un torrente lo primero que debe hacer es no ser arrastrado por él.
Sorprenderse, extrañarse, es comenzar a entender.
No somos disparados a la existencia como una bala de fusil cuya trayectoria está absolutamente determinada. Es falso decir que lo que nos determina son las circunstancias. Al contrario, las circunstan...
Sin amor, estarÃamos como niños perdidos en la inmensidad del cosmos.
El mundo es la suma total de nuestras posibilidades vitales.
Ser de la izquierda es, como ser de la derecha, una de las infinitas maneras que el hombre puede elegir para ser un imbécil: ambas, en efecto, son formas de la hemiplejÃa moral.
He reducido el mundo a mi jardÃn y ahora veo la intensidad de todo lo que existe.