Cada cual es como Dios le ha hecho, pero llega a ser como él mismo se hace.
En la Biblia no hay menciones a la Trinidad. Nosotros conocemos a Dios no por nuestras orgullosas concepciones filosóficas, sino a través de Cristo.
A quien se le planta y siembra con la predicación, se le riega y vivifica con el bautismo y se le alimenta con la cena del Señor.
Propio de la condición humana es la enfermedad de creer a los demás impostores e impíos, no a nosotros mismos, porque nadie reconoce sus propios errores...
La luz da el ser a la cosa, la luz es la forma de la cosa...la luz es lo más hermoso de este mundo y del otro.
En este mundo no hay verdad alguna, sino simulacros vanos y sombras que pasan. La verdad es Dios eterno...
Con mis propios ojos he visto yo mismo cómo lo llevaban con pompa sobre sus hombros los príncipes, y cómo lo adoraba todo el pueblo de rodillas a lo largo de las calles.
Colón fue el descubridor de un continente y de muchas islas que los españoles gobiernan ahora felizmente. Por eso están tan radicalmente equivocados los que llaman América a este continente.
Miguel Servet, solo, pero confiado en la protección segurísima de Cristo.
El otro nombre, el más santo por encima de todos, ????, puede interpretarse como sigue: 'el que hace ser', 'el que convierte en esencial', 'la causa de la existencia
La fe, si se considera en su propiedad esencial y pura, no contiene tal perfección como el amor...El amor es superior a todo...durable, sublime, más parecido a Dios...
El hombre es libre, y recibe de los astros, solo inclinaciones y tendencias. La preordenación, predestinación, elección, son inventos de Simón Mago.
Dios nos dio la mente para que le reconozcamos a Él mismo.
No deben imponerse como verdades conceptos sobre los que existen dudas.
En el cuerpo de Cristo se concilia, concurre, recapitula y resuelve todo: Dios y el hombre, el cielo y la tierra, la circuncisión y el prepucio.
¿Quién puede llamar ortodoxo a un ministro de la Iglesia que es acusador, criminal y homicida?
Lo divino ha bajado hasta lo humano, para que el humano pueda ascender hasta lo divino.
Si yo amo una persona, de modo entrañable, estoy pendiente de ella; a ella me entrego en todo y para todo y ella me conduce a donde quiera.
Cristo camina en las olas del viento y habita en el vértice de la Tierra, mide los cielos con su palmo y le caben en sus manos las aguas del mar.
Yo no separo a Cristo y a Dios más que una voz del hablante o un rayo del Sol.