Leed la Biblia una y mil veces; si no le tenéis gusto es que habéis perdido la llave del conocimiento.
Es un principio general que todas las cosas han salido de la raíz divina, son parte y porción de Dios, y la naturaleza de las cosas es el espíritu de Dios.
Es un abuso condenar a muerte a aquellos que se equivocaron en sus interpretaciones de la Biblia.
¡Oh, Cristo, Hijo de Dios eterno, salva mi anima! ¡El hacha! ¡El hacha!; la hoguera no!
No estamos obligados a juzgar según la Ley, aunque la ley nos muestra bien el pecado.
Si me hallas en error en un solo punto, no debes por eso condenarme en todos.
España es aventajada por Francia en la abundancia de vino, cereal y carnes, pero la supera en la bondad y el sabor de ellos.
La fe es la puerta; la caridad la perfección. Ni la fe sin caridad, ni la caridad sin fe.
Hay un brillo del Sol y otro de la Luna; uno del fuego y otro del agua. Todos fueron dotados de luz por Cristo, arquitecto del mundo.
Amortigua la circuncisión el apetito de la carne, como queda amortiguado el oido si se le cortan a uno las orejas o la vista si se le cortan los parpados.
La fe enciende la lámpara que solo el aceite del amor hace arder.
Considero un asunto muy grave el matar a los hombres por creer que están en el error o por algún detalle de interpretación escriturística, cuando sabemos que el más elegido se puede equivocar.
No podrá ser un buen geógrafo el que no esté seriamente versado en Matemáticas.
Ni con estos, ni con aquellos estoy conforme ni disiento en todo. Todos tienen parte de verdad y parte de error, y cada cual descubre el error en otro sin ver el suyo.
Arderé, pero eso será un mero incidente. Continuaremos nuestra discusión en la eternidad.
Lo cierto es que fueron muchos los que pronunciaron ese nombre en la antigüedad.